/ sábado 21 de abril de 2018

CARPE DIEM EL ORO NEGRO

“Las bases de la justicia consisten en evitar que nadie padezca daño y en servir al bien público”


Cicerón


(TERCERA PARTE)


Lic. Francisco Sunderland Álvarez

Es prudente que se sepa que en el área jurídica de Petróleos Mexicanos las situaciones, aunque diferentes en tiempo y bajo una perspectiva distinta, el cumplimiento de las normas no cambia, ya que lo único que varía son los actores y los demandados.


Durante los muchos años, en la industria petrolera, la Gerencia Jurídica estuvo dirigida por personalidades reconocidas en el foro, como el Lic. Antonio de P. Moreno; el Lic. Fausto Acosta Romo; el Lic. Víctor Manuel Ostos L.; habían asesores como el Lic. Julio César Olivé Negrete; el Lic. Manuel G. Leyva; el Lic. José Becerra Bautista; el Lic. Mario López Escalera, etc., y, para entrar a laborar al jurídico, se debían acreditar conocimientos.


Así empezaba el “calvario” de quienes deseaban ser contratados de planta, ya que debieron de haber pasado varios años de práctica en el área que les hubiese correspondido (laboral, civil, amparos, fiscal, etc.) y luego, por medio de su trabajo y desempeño, tanto en las oficinas como en el litigio, era como iban recibiendo el reconocimiento para que se les considerara con un ascenso temporal o definitivo.


Para llegar a ser Jefe de Rama o responsable de algún grupo de abogados, era preciso que la experiencia en ese arduo caminar, quedara demostrada bajo los parámetros de una auténtica “meritocracia” y no como los que ahora prevalecen de la “dedocracia”.


Todos tenían claro el rol laboral que debían desempeñar y, en cuanto a los puestos de Gerente y Subgerentes, estaban conscientes que era una facultad discrecional del Director General o del Subdirector Técnico Administrativo quienes, precisamente, sabiendo de la experiencia de los abogados de la Institución, se cuidaban mucho de que quienes quedaran al frente de dichos puestos, fueran personas con conocimientos y experiencia reconocidos, pudiendo recaer el nombramiento en alguno de los abogados institucionales.


Lamentablemente, ante la tan apresurada necesidad de privatizar Pemex, ahora designan para algún puesto, sea directivo o no, a cualquier persona, con o sin conocimientos en materia jurídica petrolera y, en cuanto a que tengan experiencia, ni pensarlo pero, en cambio, deben “sudar” una enorme mansedumbre y docilidad para acatar cualquier instrucción superior que reciban, compensando estas características de agachamiento, carencia de conocimientos y experiencia, mediante admirables actitudes de prepotencia arbitraria y soberbia ante los subalternos.


De esta manera, con el respaldo de quienes los han designado, han “negociado” juicios o los han “perdido” en beneficio propio o, simplemente, por la supina ignorancia y falta de experiencia, ya que no a cualquier abogado, por competente y experimentado que sea, se le facilitan los asuntos de Pemex toda vez que, de una manera u otra, se requiere estar familiarizado con su especializada y extensa normatividad interna para defender sus intereses. Y esto requiere mucho tiempo.


Ya desde hace algunos años, llegan a tal extremo las arbitrariedades del área jurídica, que se exponen a la vista pública en el diario La Jornada de México, pág.13 del 05 de marzo del 2018.


También queda expuesto el titular del área jurídica ante el Director General de Petróleos Mexicanos, según escrito presentado el 15 de diciembre del 2017 sin que se hayan corregido las arbitrariedades reiteradas cometidas por el titular de la citada área jurídica y expuestas con nitidez y puntualidad en dicho escrito mediante el cual queda plasmado el incumplimiento de los acuerdos contraídos con los firmantes, bajo los cuales fueron designados como representantes de la empresa ante las diversas Juntas Especiales de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, exponiendo, además, los hechos de que les adeudan las compensaciones por los años 2015, 2016, 2017 y seguramente lo que va del presente.


Obviamente queda material para muchas semanas pero, por lo pronto, hasta aquí comentamos otro triste pasaje de la que fuera una de las mejores empresas petroleras del mundo porque, a partir de su silenciosa privatización en pedazos, se les puede asegurar, apreciables lectores, que ya no les retendrán, a las nuevas empresas sus utilidades, sino que el gobierno quedará tranquilo solo con los impuestos y con los dividendos de sus afortunados dueños.


Universalmente les deseo, hoy y siempre, Salud, para que logremos nuestros objetivos en la vida. Fuerza, para que no nos desalentemos ante las adversidades y, Unión, para que no seamos divididos en nuestras convicciones. Prohibida su reproducción parcial o total. La copia o distribución no autorizada de este artículo por el autor y, en su caso, su correspondiente imagen, infringe los derechos de autor.


fsacomentarios@gmail.com

“Las bases de la justicia consisten en evitar que nadie padezca daño y en servir al bien público”


Cicerón


(TERCERA PARTE)


Lic. Francisco Sunderland Álvarez

Es prudente que se sepa que en el área jurídica de Petróleos Mexicanos las situaciones, aunque diferentes en tiempo y bajo una perspectiva distinta, el cumplimiento de las normas no cambia, ya que lo único que varía son los actores y los demandados.


Durante los muchos años, en la industria petrolera, la Gerencia Jurídica estuvo dirigida por personalidades reconocidas en el foro, como el Lic. Antonio de P. Moreno; el Lic. Fausto Acosta Romo; el Lic. Víctor Manuel Ostos L.; habían asesores como el Lic. Julio César Olivé Negrete; el Lic. Manuel G. Leyva; el Lic. José Becerra Bautista; el Lic. Mario López Escalera, etc., y, para entrar a laborar al jurídico, se debían acreditar conocimientos.


Así empezaba el “calvario” de quienes deseaban ser contratados de planta, ya que debieron de haber pasado varios años de práctica en el área que les hubiese correspondido (laboral, civil, amparos, fiscal, etc.) y luego, por medio de su trabajo y desempeño, tanto en las oficinas como en el litigio, era como iban recibiendo el reconocimiento para que se les considerara con un ascenso temporal o definitivo.


Para llegar a ser Jefe de Rama o responsable de algún grupo de abogados, era preciso que la experiencia en ese arduo caminar, quedara demostrada bajo los parámetros de una auténtica “meritocracia” y no como los que ahora prevalecen de la “dedocracia”.


Todos tenían claro el rol laboral que debían desempeñar y, en cuanto a los puestos de Gerente y Subgerentes, estaban conscientes que era una facultad discrecional del Director General o del Subdirector Técnico Administrativo quienes, precisamente, sabiendo de la experiencia de los abogados de la Institución, se cuidaban mucho de que quienes quedaran al frente de dichos puestos, fueran personas con conocimientos y experiencia reconocidos, pudiendo recaer el nombramiento en alguno de los abogados institucionales.


Lamentablemente, ante la tan apresurada necesidad de privatizar Pemex, ahora designan para algún puesto, sea directivo o no, a cualquier persona, con o sin conocimientos en materia jurídica petrolera y, en cuanto a que tengan experiencia, ni pensarlo pero, en cambio, deben “sudar” una enorme mansedumbre y docilidad para acatar cualquier instrucción superior que reciban, compensando estas características de agachamiento, carencia de conocimientos y experiencia, mediante admirables actitudes de prepotencia arbitraria y soberbia ante los subalternos.


De esta manera, con el respaldo de quienes los han designado, han “negociado” juicios o los han “perdido” en beneficio propio o, simplemente, por la supina ignorancia y falta de experiencia, ya que no a cualquier abogado, por competente y experimentado que sea, se le facilitan los asuntos de Pemex toda vez que, de una manera u otra, se requiere estar familiarizado con su especializada y extensa normatividad interna para defender sus intereses. Y esto requiere mucho tiempo.


Ya desde hace algunos años, llegan a tal extremo las arbitrariedades del área jurídica, que se exponen a la vista pública en el diario La Jornada de México, pág.13 del 05 de marzo del 2018.


También queda expuesto el titular del área jurídica ante el Director General de Petróleos Mexicanos, según escrito presentado el 15 de diciembre del 2017 sin que se hayan corregido las arbitrariedades reiteradas cometidas por el titular de la citada área jurídica y expuestas con nitidez y puntualidad en dicho escrito mediante el cual queda plasmado el incumplimiento de los acuerdos contraídos con los firmantes, bajo los cuales fueron designados como representantes de la empresa ante las diversas Juntas Especiales de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, exponiendo, además, los hechos de que les adeudan las compensaciones por los años 2015, 2016, 2017 y seguramente lo que va del presente.


Obviamente queda material para muchas semanas pero, por lo pronto, hasta aquí comentamos otro triste pasaje de la que fuera una de las mejores empresas petroleras del mundo porque, a partir de su silenciosa privatización en pedazos, se les puede asegurar, apreciables lectores, que ya no les retendrán, a las nuevas empresas sus utilidades, sino que el gobierno quedará tranquilo solo con los impuestos y con los dividendos de sus afortunados dueños.


Universalmente les deseo, hoy y siempre, Salud, para que logremos nuestros objetivos en la vida. Fuerza, para que no nos desalentemos ante las adversidades y, Unión, para que no seamos divididos en nuestras convicciones. Prohibida su reproducción parcial o total. La copia o distribución no autorizada de este artículo por el autor y, en su caso, su correspondiente imagen, infringe los derechos de autor.


fsacomentarios@gmail.com

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