/ sábado 16 de mayo de 2020

LA EDUCACIÓN Y EL CICLO ESCOLAR

El día del maestro llegó en uno de los momentos de mayor incertidumbre de la historia para la educación en México, pero también en un momento que ha destacado la labor de los buenos maestros y en el que se ha demostrado que cuando la voluntad existe, no hay obstáculo que no se supere.

Durante los últimos meses muchos maestros aprendieron a dar clases en plataformas virtuales, se esforzaron para adaptarse a una forma de enseñanza que posiblemente nunca habían utilizado y demostraron que el compromiso con la educación y con los estudiantes es mayor que cualquier adversidad, pero esto no es una realidad que defina a todo el país o todos los casos.

La brecha digital y el uso de tecnologías de la información todavía dista de ser una realidad para todos los mexicanos y en el contexto de la pandemia, si no se atiende el tema de la educación de forma asertiva, se hará más prominente la desigualdad entre aquellos que tienen acceso a la tecnología y al internet de aquellos que no.

La cancelación de las clases fue y sigue siendo una acción necesaria y de absoluta responsabilidad, sin embargo, bajo el concepto del semáforo y del regreso gradual a las actividades cada uno de los estados de la República seguirá sus propios criterios y esto puede devenir en una disparidad de formación entre alumnos del mismo grado. En Guanajuato, Coahuila, Chihuahua, Baja California Sur, Tamaulipas y varios estados más se pronunciaron en contra del regreso a clases en junio. En Querétaro, por ejemplo, se anunció que estaban en condiciones de terminar el ciclo escolar de forma virtual alrededor de 655,000 estudiantes y en otras entidades, con menores casos y riesgos, se plantea que regresen a clases desde la tercera semana de mayo.

También se ha dicho que todos los escolares van a ser aprobados y así no perderán el ciclo escolar y aunque dicha medida es positiva en sentido administrativo, si no es acompañada por un programa de regulación, los educandos podrían quedar con grandes lagunas de conocimiento. No bastará con ampliar un mes o más el ciclo escolar, ni tampoco se va a solucionar aprobando a todos los estudiantes sin distingo, hay fallas de conocimiento que pueden marcar negativamente toda la vida de un colegial. Entre otras cosas, será necesario modificar y adaptar el modelo educativo a los nuevos contenidos y a la nueva realidad, observando que la participación de los padres y la interacción de los tres ejes: alumnos, maestros y padres de familia, ha cambiado de fondo y posiblemente de forma permanente.

La pandemia nos ha quitado la normalidad y la posibilidad de hacer las cosas como hemos estado acostumbrados, pero la educación no se debe detener. Dentro de la incertidumbre en que estamos es importante reconocer que podemos aprovechar para hacer cambios positivos en lo que venga después y la educación puede mejorar y puede llegar a convertirse en el pilar principal de nuestro país.

Felicito una vez más a todos los buenos maestros de México que no se rinden, y reitero que, si de todo este caos podemos construir un mejor sistema educativo y empezar una apuesta por la economía del conocimiento, habremos hecho de algo negativo una oportunidad para todo un país.

@JCRomeroHicks



El día del maestro llegó en uno de los momentos de mayor incertidumbre de la historia para la educación en México, pero también en un momento que ha destacado la labor de los buenos maestros y en el que se ha demostrado que cuando la voluntad existe, no hay obstáculo que no se supere.

Durante los últimos meses muchos maestros aprendieron a dar clases en plataformas virtuales, se esforzaron para adaptarse a una forma de enseñanza que posiblemente nunca habían utilizado y demostraron que el compromiso con la educación y con los estudiantes es mayor que cualquier adversidad, pero esto no es una realidad que defina a todo el país o todos los casos.

La brecha digital y el uso de tecnologías de la información todavía dista de ser una realidad para todos los mexicanos y en el contexto de la pandemia, si no se atiende el tema de la educación de forma asertiva, se hará más prominente la desigualdad entre aquellos que tienen acceso a la tecnología y al internet de aquellos que no.

La cancelación de las clases fue y sigue siendo una acción necesaria y de absoluta responsabilidad, sin embargo, bajo el concepto del semáforo y del regreso gradual a las actividades cada uno de los estados de la República seguirá sus propios criterios y esto puede devenir en una disparidad de formación entre alumnos del mismo grado. En Guanajuato, Coahuila, Chihuahua, Baja California Sur, Tamaulipas y varios estados más se pronunciaron en contra del regreso a clases en junio. En Querétaro, por ejemplo, se anunció que estaban en condiciones de terminar el ciclo escolar de forma virtual alrededor de 655,000 estudiantes y en otras entidades, con menores casos y riesgos, se plantea que regresen a clases desde la tercera semana de mayo.

También se ha dicho que todos los escolares van a ser aprobados y así no perderán el ciclo escolar y aunque dicha medida es positiva en sentido administrativo, si no es acompañada por un programa de regulación, los educandos podrían quedar con grandes lagunas de conocimiento. No bastará con ampliar un mes o más el ciclo escolar, ni tampoco se va a solucionar aprobando a todos los estudiantes sin distingo, hay fallas de conocimiento que pueden marcar negativamente toda la vida de un colegial. Entre otras cosas, será necesario modificar y adaptar el modelo educativo a los nuevos contenidos y a la nueva realidad, observando que la participación de los padres y la interacción de los tres ejes: alumnos, maestros y padres de familia, ha cambiado de fondo y posiblemente de forma permanente.

La pandemia nos ha quitado la normalidad y la posibilidad de hacer las cosas como hemos estado acostumbrados, pero la educación no se debe detener. Dentro de la incertidumbre en que estamos es importante reconocer que podemos aprovechar para hacer cambios positivos en lo que venga después y la educación puede mejorar y puede llegar a convertirse en el pilar principal de nuestro país.

Felicito una vez más a todos los buenos maestros de México que no se rinden, y reitero que, si de todo este caos podemos construir un mejor sistema educativo y empezar una apuesta por la economía del conocimiento, habremos hecho de algo negativo una oportunidad para todo un país.

@JCRomeroHicks