/ martes 10 de marzo de 2020

¿Realmente necesitas dinero? (Parte I)


Dinero es el dolor de cabeza de Godínez, emprendedores, empresarios… pareciera que lo es de todo mundo. En primera, porque buscar una institución que lo preste en las mejores condiciones posibles es desgastante, después, vienen las preocupaciones sobre cómo pagarlo (aunque el proceso debe ser al revés).

Lo recomendable es que cualquier proceso de financiamiento sea planeado para que genere más beneficios que angustias. Como consultora, pocas veces recomiendo el endeudamiento como primera opción porque generalmente sí hay dinero pero está mal administrado, entonces, lo que falta es una estructura que permita optimizar los recursos.\u0009.

¿Es bueno para pedir prestado?

La respuesta es sí y no. Depende de varios factores: para qué lo quieres, cómo y cuándo lo pagarás, condiciones del financiamiento y el entorno económico, entre otras.

Se espera que en 2020 las empresas produzcan menos y generen poco empleo, algo a tener muy en cuenta. Si eres empleado o emprendedor considera que la situación es desfavorable para endeudarse sin un buen motivo. Aunque no todos son afectados por igual: los sectores de cuidado de la salud, entretenimiento, mascotas y productos eco-amigables están en pleno auge.

La decisión informada es la mejor, así que aquí van 3 buenos motivos para hacerlo:

  1. Alcanzar Liquidez. En términos sencillos es tener dinero para hacer tus pagos cotidianos. Si tienes más de una deuda, seguramente es a diferentes tasas de interés y plazos. Un solo crédito en mejores condiciones permitirá liberar presión sobre tus ingresos, lo cual además te facilitará planear con mayor confianza.

  2. Invertir en infraestructura. Instalaciones, equipo, máquinas, software y todo aquello que te haga eficiente y/o disminuya los costos. En un mundo donde hasta las pizzas se piden por app y empresas locales exportan al otro lado del mundo el que se queda atrás, desaparece.

  3. Crear un historial de crédito. Es de las cosas que no sabemos que necesitamos hasta que nos las piden. Adquirir deudas y pagarlas de manera adecuada nos generará puntaje positivo en las instituciones financieras que a su vez nos ofrecerán montos mayores y en mejores condiciones una vez probado nuestro cumplimiento.

Irse de vacaciones o pagar una fiesta, son malas razones para elegir endeudarse porque deberíamos ser capaces de pagarlas con nuestros propios ingresos a través del ahorro.

La siguiente semana hablaremos sobre las desventajas.


Dinero es el dolor de cabeza de Godínez, emprendedores, empresarios… pareciera que lo es de todo mundo. En primera, porque buscar una institución que lo preste en las mejores condiciones posibles es desgastante, después, vienen las preocupaciones sobre cómo pagarlo (aunque el proceso debe ser al revés).

Lo recomendable es que cualquier proceso de financiamiento sea planeado para que genere más beneficios que angustias. Como consultora, pocas veces recomiendo el endeudamiento como primera opción porque generalmente sí hay dinero pero está mal administrado, entonces, lo que falta es una estructura que permita optimizar los recursos.\u0009.

¿Es bueno para pedir prestado?

La respuesta es sí y no. Depende de varios factores: para qué lo quieres, cómo y cuándo lo pagarás, condiciones del financiamiento y el entorno económico, entre otras.

Se espera que en 2020 las empresas produzcan menos y generen poco empleo, algo a tener muy en cuenta. Si eres empleado o emprendedor considera que la situación es desfavorable para endeudarse sin un buen motivo. Aunque no todos son afectados por igual: los sectores de cuidado de la salud, entretenimiento, mascotas y productos eco-amigables están en pleno auge.

La decisión informada es la mejor, así que aquí van 3 buenos motivos para hacerlo:

  1. Alcanzar Liquidez. En términos sencillos es tener dinero para hacer tus pagos cotidianos. Si tienes más de una deuda, seguramente es a diferentes tasas de interés y plazos. Un solo crédito en mejores condiciones permitirá liberar presión sobre tus ingresos, lo cual además te facilitará planear con mayor confianza.

  2. Invertir en infraestructura. Instalaciones, equipo, máquinas, software y todo aquello que te haga eficiente y/o disminuya los costos. En un mundo donde hasta las pizzas se piden por app y empresas locales exportan al otro lado del mundo el que se queda atrás, desaparece.

  3. Crear un historial de crédito. Es de las cosas que no sabemos que necesitamos hasta que nos las piden. Adquirir deudas y pagarlas de manera adecuada nos generará puntaje positivo en las instituciones financieras que a su vez nos ofrecerán montos mayores y en mejores condiciones una vez probado nuestro cumplimiento.

Irse de vacaciones o pagar una fiesta, son malas razones para elegir endeudarse porque deberíamos ser capaces de pagarlas con nuestros propios ingresos a través del ahorro.

La siguiente semana hablaremos sobre las desventajas.