/ jueves 9 de enero de 2020

UG: TU CONECTE CON LA CIENCIA

Brinquete burro. Juegos y juguetes tradicionales


Dr. Gabriel Medrano de Luna

Departamento de Educación, División de Ciencias Sociales y Humanidades

Campus Guanajuato, Universidad de Guanajuato

Las diversas expresiones del arte popular mexicano son una muestra del papel que ha jugado la cultura en la vida de los pueblos, tal es el caso del juguete popular, a través de este podemos evidenciar el contexto sociocultural de la comunidad y la tradición familiar de quien lo elabora. Guanajuato ha sobresalido a nivel nacional e internacional y se ha distinguido por ser un gran centro productor de juguetes tradicionales, en muchos de sus municipios aún se siguen elaborando y la tradición ha pervivido gracias a que ciertos artesanos siguen enseñando a los niños la elaboración de juguetes.

El juguete popular no es privativo de un país o de una cultura específica, sería aventurado afirmar algún origen geográfico del mismo ya que en todas las culturas del mundo y en todos los tiempos han existido juguetes. Valdría más señalar la función lúdica que se le ha asignado al juguete y que va muy ligada a otro elemento esencial que es el juego habitualmente, para el ser humano, juego y juguete tienen la finalidad de jugar, de divertirse; y para el niño, esta dualidad entre el juego y el juguete le abren la posibilidad de la imaginación, formando así una tríada que permite la creación de objetos y formas convertidos en juguetes, los cuales adoptan múltiples manifestaciones y modalidades.

Los juegos y juguetes tradicionales han desempeñado a través del tiempo un papel fundamental en los niños al permitirles conquistar ciertos conocimientos y habilidades tanto físicas como mentales. Además de fomentar la colectividad, la no violencia, los valores familiares y una tradición trasmitida de padres a hijos. Para jugar se necesitaban mínimo dos personas; además se debían respetar ciertas reglas pues de lo contrario habría algún castigo… recordemos algunos juegos como los encantados, las escondidas, el bebeleche que en muchas parte se le nombra “el avión”, las choyas (conocidos como los “quemados” en otras regiones), las “cebollitas”, el brinquete burro, brincar la cuerda, el yoyo, las canicas, las comiditas, el trompo, rondas infantiles, el balero, el tacón, la rayuela, jalar carritos con un cordón, etcétera.

Además de los juegos referidos, hay un sinfín de juguetes tradicionales que se siguen elaborando de manera artesanal, Guanajuato es uno de los principales centros productores de juguete a nivel nacional. Los artesanos siguen construyendo piezas únicas, con diseños y formas muy personales, sus juguetes son el reflejo de la tradición familiar, de la identidad y cultura de los pueblos del que forman parte.

Muchas veces no valoramos los juguetes o el arte popular mexicano, no sólo la pieza en sí que ya son verdaderas obras de arte, sino también al contexto y significado que está detrás de cada creación, no somos capaces de imaginar que el artesano deja impregnado una parte de su vida en su obra, no se hace en serie y a cada una le dedicó parte de su esencia, su cultura y su historia, ligada al contexto guanajuatense.

Finalmente, consideramos que a pesar de que el destino de muchos juguetes sean los museos o las colecciones particulares, siempre habrá algún niño que desee jugar con el juguete popular sea cual fuere su origen, gracias a la función lúdica del juguete. Así nuevamente se dará la relación triádica entre el juguete-juego-imaginación, creemos que mientras existan niños difícilmente se acabará la tradición del juguete popular y en Guanajuato podría pervivir esta rica tradición artesanal.

Cualquier comentario sobre este artículo, favor de dirigirlo a eugreka@ugto.mx. Para consulta de más artículos www.ugto.mx/eugreka

Brinquete burro. Juegos y juguetes tradicionales


Dr. Gabriel Medrano de Luna

Departamento de Educación, División de Ciencias Sociales y Humanidades

Campus Guanajuato, Universidad de Guanajuato

Las diversas expresiones del arte popular mexicano son una muestra del papel que ha jugado la cultura en la vida de los pueblos, tal es el caso del juguete popular, a través de este podemos evidenciar el contexto sociocultural de la comunidad y la tradición familiar de quien lo elabora. Guanajuato ha sobresalido a nivel nacional e internacional y se ha distinguido por ser un gran centro productor de juguetes tradicionales, en muchos de sus municipios aún se siguen elaborando y la tradición ha pervivido gracias a que ciertos artesanos siguen enseñando a los niños la elaboración de juguetes.

El juguete popular no es privativo de un país o de una cultura específica, sería aventurado afirmar algún origen geográfico del mismo ya que en todas las culturas del mundo y en todos los tiempos han existido juguetes. Valdría más señalar la función lúdica que se le ha asignado al juguete y que va muy ligada a otro elemento esencial que es el juego habitualmente, para el ser humano, juego y juguete tienen la finalidad de jugar, de divertirse; y para el niño, esta dualidad entre el juego y el juguete le abren la posibilidad de la imaginación, formando así una tríada que permite la creación de objetos y formas convertidos en juguetes, los cuales adoptan múltiples manifestaciones y modalidades.

Los juegos y juguetes tradicionales han desempeñado a través del tiempo un papel fundamental en los niños al permitirles conquistar ciertos conocimientos y habilidades tanto físicas como mentales. Además de fomentar la colectividad, la no violencia, los valores familiares y una tradición trasmitida de padres a hijos. Para jugar se necesitaban mínimo dos personas; además se debían respetar ciertas reglas pues de lo contrario habría algún castigo… recordemos algunos juegos como los encantados, las escondidas, el bebeleche que en muchas parte se le nombra “el avión”, las choyas (conocidos como los “quemados” en otras regiones), las “cebollitas”, el brinquete burro, brincar la cuerda, el yoyo, las canicas, las comiditas, el trompo, rondas infantiles, el balero, el tacón, la rayuela, jalar carritos con un cordón, etcétera.

Además de los juegos referidos, hay un sinfín de juguetes tradicionales que se siguen elaborando de manera artesanal, Guanajuato es uno de los principales centros productores de juguete a nivel nacional. Los artesanos siguen construyendo piezas únicas, con diseños y formas muy personales, sus juguetes son el reflejo de la tradición familiar, de la identidad y cultura de los pueblos del que forman parte.

Muchas veces no valoramos los juguetes o el arte popular mexicano, no sólo la pieza en sí que ya son verdaderas obras de arte, sino también al contexto y significado que está detrás de cada creación, no somos capaces de imaginar que el artesano deja impregnado una parte de su vida en su obra, no se hace en serie y a cada una le dedicó parte de su esencia, su cultura y su historia, ligada al contexto guanajuatense.

Finalmente, consideramos que a pesar de que el destino de muchos juguetes sean los museos o las colecciones particulares, siempre habrá algún niño que desee jugar con el juguete popular sea cual fuere su origen, gracias a la función lúdica del juguete. Así nuevamente se dará la relación triádica entre el juguete-juego-imaginación, creemos que mientras existan niños difícilmente se acabará la tradición del juguete popular y en Guanajuato podría pervivir esta rica tradición artesanal.

Cualquier comentario sobre este artículo, favor de dirigirlo a eugreka@ugto.mx. Para consulta de más artículos www.ugto.mx/eugreka

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