Luego de ver la actuación del defensa central Gabriel Báez en los dos juegos, nadie pudiera imaginarse que fue operado el miércoles 5 de mayo, tuvo una fractura en la nariz como saldo del encuentro de semifinales ante el Inter de Playa del Carmen, antes de entrar el quirófano solamente pregunto, ¿puedo jugar?, cuando le dieron luz verde de inmediato acepto.

Un verdadero guerrero de la cancha que no quiso perderse la gran final ante Cruz Azul Hidalgo, sus ganas de contribuir con el equipo estaban a tope, incluso desde el primer duelo decidió no utilizar una protección especial, entregándose al máximo en cada encuentro.

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Hace años en 1999 Martín Rodríguez decidió jugar con las costillas fracturadas en la final ante Zacatepec, ahora Gabriel Báez lo hizo en plena recuperación, demostrando esos deseos de aportarle al equipo Irapuato, siendo pieza clave en la zona defensiva.