Celebra Iglesia pluralidad en discusión de Reforma Educativa

Enrique Díaz Díaz, obispo de Irapuato y responsable de la Dimensión de Pastoral Educativa y de Cultura de la Conferencia del Episcopado Mexicano, dijo que la Iglesia católica mexicana ve con buenos ojos la propuesta de modificar el artículo tercero de a Constitución, para garantizar la educación a todos los niños y niñas de México, pero con un enfoque de respeto a la dignidad humana.

“Celebramos los recientes esfuerzos conjuntos de redacción entre el gobierno y la sociedad, con su pluralidad e actores, para la reforma al artículo tercero Constitucional, así como sus resultados, entre otros el abordar la complejidad del Sistema Educativo Nacional desde la centralidad del derecho humano a la educación, así como privilegiar el interés superior de los niños, niñas y adolescentes”, dijo el Obispo de Irapuato.

Enrique Díaz Díaz dijo que la Iglesia se mostrará participativa en la actualización de la Reforma Educativa, pero con respeto a la tarea que emprende el gobierno, pues la intención es que el nuevo modelo educativo aglutine a las voces de todos los actores sociales del país.

“Como Iglesia seguiremos siendo respetuosos y propositivos con la tarea del Estado, al igual que el fortalecimiento de la educación laica, que garantiza, precisamente, la libertad religiosa para todos, especialmente para quienes queremos participar en el desarrollo de la Nación Mexicana, ofreciendo espacios de educación privada, formal y no formal, según nuestras creencias y valores de vida”.

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Solicitan no cambiar Reforma Educativa

El responsable de la Dimensión de Pastoral Educativa y de Cultura de la Conferencia del Episcopado Mexicano llamó también a los padres de familia a participar más activamente en la educación de sus hijos, pues dijo que no se debe renunciar a que en la casa es donde se tiene que asumir el rol de ser los primeros educadores.

“Llamamos a los padres de familia a asumir plenamente su responsabilidad de primeros educadores de sus hijos.

“Los animamos a que se involucren activamente en los organismos de participación escolar, así como a reforzar lo enseñado en casa y en la escuela, con espacios de educación no formal: escultismo, promoción del arte, el deporte, la cultura y la religión, en lo que niños y jóvenes puedan ir integrando el arte de la vida”.