Crece interés para formar parte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Irapuato

Alfonso Palomeque Fuentes, director General de Profesionalización de Seguridad Ciudadana, dijo que se graduaron recientemente alrededor de 20 elementos y hay en proceso más de 10 aspirantes nuevos a policías, por lo que añadió que las convocatorias para tránsitos y policías municipales son permanentes, debido a la gran demanda, debido a esto invitó a la ciudadanía a formar parte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.

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“Acabamos de concluir una generación de tránsito, en donde se graduaron 22 elementos de tránsito y ahorita tenemos en proceso 13 policías”.

Explicó que el reclutamiento de policías municipales y tránsitos siempre está disponible esto debido a que en Irapuato existe una demanda muy grande, pero aseguró que la solución a esta situación la tiene el mismo Centro de Control de Confianza.

“La convocatoria es permanente y está abierta, esto porque nuestro índice es el Centro de Control de Confianza que está ubicado en la ciudad de León”.

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Recordó que los requisitos para poder ser parte del equipo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana son: ser ciudadano mexicano en pleno ejercicio de sus derechos políticos y civiles; tener entre 18 y 40 años para mujeres y en el caso de los hombres entre 19 y 40 años; estatura mínima de 1.65 metros para hombres y 1.60 metros para mujeres; no haber sido ordenado por sentencia irreversible por delito doloso y no estar sujeto a proceso penal; en caso de los hombres deben tener acreditado el servicio militar nacional; haber concluido los estudios del nivel medio superior; presentar y aprobar las evaluaciones de control y confianza; cumplir con los requisitos del perfil de puesto, físico, médico y de personalidad que establezca la institución; no consumir sustancias psicotrópicas, estupefacientes u otras que produzcan efectos similares; no presentar tatuajes visibles; no estar suspendido o inhabilitado al haber sido destituido por resolución firme como servidor público; consentimiento para someterse a las evaluaciones de control y confianza; que la información y documentación proporcionadas sean auténticas y autorizan que la institución realice las investigaciones necesarias para comprobarlas; tener el compromiso para sujetarse a las normas y disposiciones que en materia disciplinar emita la institución, así como aceptar las sanciones que en consecuencia se apliquen, incluyendo la conclusión del proceso de evaluación.