Implicaría riesgos, Guardia Nacional

IRAPUATO, Gto.- El extitular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Juan Miguel Alcántara Soria, consideró que la propuesta para conformar a la próxima Guardia Nacional con elementos de las brigadas de Policía Militar que hay en el país implica un fraude a la Ley de Seguridad Interior, pues se conformaría con elementos militares, cuando ésta debería estar constituida por elementos ciudadanos y civiles.

En entrevista exclusiva con Organización Editorial Mexicana, Juan Miguel Álcántara Soria analizó las propuestas en materia de seguridad hechas por Andrés Manuel López Obrador y dijo que de conformarse la Guardia Nacional, como lo anunció Alfonso Durazo, con elementos de las 12 brigadas de Policía Militar, se estaría cubriendo a la Guardia Nacional “con piel de civiles, los que en la realidad serán elementos castrenses”.

“La Guardia Nacional que está prevista en la Constitución, es un órgano eminentemente ciudadano-civil y en la Constitución está prevista que se debe integrar por estados, por entidades federativas con los ciudadanos que también la Constitución prevé tienen la obligación y el derecho de incorporarse a la Guardia Nacional para defender a su estado, si bien esta Guardia Nacional sí tiene en la Constitución a la jefatura asignada para el Presidente de la República, pero insisto, debe ser de carácter civil.

“Entonces, cuando el próximo Secretario de Seguridad anunciado por López Obrador dice que va a conformarse con las 12 brigadas de la Policía Militar, implica entonces que se está cubriendo con piel de civiles lo que en la realidad son elementos castrenses, elementos militares y esto implica un fraude a la Ley de Seguridad Interior, pues le están dando la vuelta por atrás a esa disposición que tiene un tratamiento especial, considerando que la intervención del Ejército en temas de seguridad pública es excepcional, es temporal, es acotada, es complementaria y es subsidiaria”, explicó quien también fuera el Procurador General de Justicia del Estado de Guanajuato.

Juan Miguel Alcántara Soria comentó que esto traería graves riesgos y problemas a diferentes estados, entre ellos Guanajuato, en donde apenas el pasado nueve de julio tuvo la inauguración de la 12a. Brigada de la Policía Militar, conformada por cuatro batallones que en total albergan a unos dos mil 400 elementos y donde hubo una inversión de 400 millones de pesos, recursos aportados por el gobierno estatal, los gobiernos municipales e incluso del sector privado.

“Y entonces ahora, como lo anuncia Alfonso Durazo, tendremos a las brigadas convertidas en Guardia Nacional y esto además tiene implicaciones muy graves, por ejemplo para Guanajuato, pues si se cumple con esta decisión impulsada por Durazo, entonces los dos mil 400 elementos que conforman los batallones de la brigada de la Policía Militar los vamos a tener que compartir, no sé si nada más con Querétaro y Michoacán, que son con quienes integramos la XII Región Militar, sino eventualmente se podrían mover a otras partes del país”.

Por ello, explicó que para este caso de Guanajuato no sería extraño que tanto el Gobierno de Guanajuato y los municipios que aportaron en conjunto los 400 millones de pesos para la construcción de esta Brigada de la Policía Militar pudieran interponer controversias constitucionales, pues no es sólo se trata del tema de la afectación de los recursos públicos que fueron invertidos para esta brigada, sino que también aquellas corresponsabilidades adquiridas para garantizar la paz en el estado se verían obstaculizadas por esta decisión de conformar la Guardia Nacional con elementos de la Policía Militar.

“Y vamos a un plano más nacional: es de preocuparse, porque no hay una conformación de la Guardia Nacional con un esfuerzo de realizar un proceso de convocatoria, de preselección, de capacitación, de especialización de esa Guardia Nacional, sino que simplemente se le están segregando al Ejército estos batallones y estaríamos entonces aquí en un problema frente al Artículo 21 Constitucional, que de manera puntual, clara y precisa señala que las instituciones de seguridad pública deben ser civiles y el Ejército sólo puede excepcionalmente, temporalmente participar en temas de seguridad pública.

“Entonces, con la conformación que se le pretende dar a la Guardia Nacional, pues tendríamos ya no de manera excepcional o temporal la presencia del Ejército en las calles, sino que sería de manera permanente y definitiva a través de estos batallones convertidos en Guardia Nacional y eso hasta contraviene el compromiso de López Obrador de regresar al Ejército a sus cuarteles”.