Polo Argüelles lleva más de 40 años dedicándose a la instalación y manejo de juegos mecánicos en fiestas patronales y festividades, como Los Barrios, y aunque la pandemia le significó un duro golpe, de nueva cuenta ha regresado a las colonias a llevar alegrías, como lo ha hecho su familia desde hace tres generaciones.
Polo Argüelles reconoció que en todos sus años como jueguero nunca había tenido complicaciones económicas como las tuvo durante el confinamiento provocado por la pandemia y aunque quiso buscar un trabajo, fue complicado, pues por su edad nadie lo contrató; por ello añoraba que fiestas como Los Barrios volvieran, para no sólo llevar alegrías, sino para también tener sustento para su familia.
“Soy la tercera generación de juegueros en mi familia, esto venía desde mi abuelo y en todos mis años jamás me había visto en la necesidad de cerrar mi puesto lo que me orilló a tener que hacer de todo para poder llevarles un taco a mi familia.
“Pero pues no fue fácil, nadie me quería contratar primeramente por que uno ya est´pa viejo, y la otra es que nunca he trabajado en otra cosa que no sea esto, no tenia la experiencia y nunca habia trabajado para nadie”, expresó Don Polo.
Tras el cambio en el semáforo epidemiológico los eventos en espacio abiertos fueron de nueva cuenta permitidos, por lo que Don Polo muy entusiasmado regresó a su trabajo y hoy disfruta como nunca las risas que sus juegos provocan en la gente.
Don Polo llamó a las personas a ser empáticas y a cuidarse, pues no sólo es el problema de que haya contagios, sino lo que esto trae consigo, de pérdidas económicas para muchas personas.
Sin embargo, Polo Argüelles espera que lo peor de la pandemia haya pasado, que poco a poco aprendan las personas a convivir con la enfermedad y que él pueda estar muchos años más en el negocio de los juegos mecánicos, en lo que la siguiente generación se prepara para continuar con el negocio familiar de llevar sonrisas a las colonias durante Los Barrios.