/ sábado 18 de diciembre de 2021

Muere hombre en la vía pública

Don Pancho sobrevivía de pagos por hacer mandados

Un hombre de aproximadamente 45 de edad perdió la vida repentinamente mientras se encontraba en una de las áreas verdes de la colonia Bajada de San Martín.

El ahora fallecido fue identificado por vecinos como “Don Pancho”, un hombre que sus últimos días los pasó en las frías calles de la colonia.

Don Pancho se estaba recuperando de una adicción por las bebidas alcohólicas, meses antes de su muerte había estado ingresado en un centro de rehabilitación de donde, según dijeron, lo sacaron a la calle, se desconocen las causas.

El hombre de aproximadamente 45 años sobrevivía cobrando una pequeña cantidad por hacer mandados a los habitantes de la colonia Bajada de San Martín, desde barrer los frentes de las casas, arreglar las flores o ir por cosas a las tiendas.

De acuerdo con testimonios, fue la mañana de este sábado que lo vieron tirado en el camellón de la calle Peral, pensaron que estaba durmiendo, todas sus pertenencias las tenía juntas a su alrededor.

Al ver que Don Pancho no respondía llamaron de inmediato a una ambulancia, minutos después paramédicos confirmaron su lamentable deceso.

El lugar de los hechos fue acordonado por elementos municipales, Don Pancho no presentaba heridas aparentes, se dijo pudo morir a causa de una falla cardíaca.

Posterior al levantamiento del cuerpo, vecinos extendieron el mandil y la gorra de Don Pancho en el camellón, aún tenía entre sus pertenencias seis pesos en una de las bolsas de su mandil y un empaque de frituras que no alcanzó a terminar, comerciantes colocaron una veladora para pedir por su eterno descanso.

Un hombre de aproximadamente 45 de edad perdió la vida repentinamente mientras se encontraba en una de las áreas verdes de la colonia Bajada de San Martín.

El ahora fallecido fue identificado por vecinos como “Don Pancho”, un hombre que sus últimos días los pasó en las frías calles de la colonia.

Don Pancho se estaba recuperando de una adicción por las bebidas alcohólicas, meses antes de su muerte había estado ingresado en un centro de rehabilitación de donde, según dijeron, lo sacaron a la calle, se desconocen las causas.

El hombre de aproximadamente 45 años sobrevivía cobrando una pequeña cantidad por hacer mandados a los habitantes de la colonia Bajada de San Martín, desde barrer los frentes de las casas, arreglar las flores o ir por cosas a las tiendas.

De acuerdo con testimonios, fue la mañana de este sábado que lo vieron tirado en el camellón de la calle Peral, pensaron que estaba durmiendo, todas sus pertenencias las tenía juntas a su alrededor.

Al ver que Don Pancho no respondía llamaron de inmediato a una ambulancia, minutos después paramédicos confirmaron su lamentable deceso.

El lugar de los hechos fue acordonado por elementos municipales, Don Pancho no presentaba heridas aparentes, se dijo pudo morir a causa de una falla cardíaca.

Posterior al levantamiento del cuerpo, vecinos extendieron el mandil y la gorra de Don Pancho en el camellón, aún tenía entre sus pertenencias seis pesos en una de las bolsas de su mandil y un empaque de frituras que no alcanzó a terminar, comerciantes colocaron una veladora para pedir por su eterno descanso.

Arte

Realizan mural en honor al cantante irapuatense Daniflow

El chiapaneco ha hecho murales en honor a artistas de la talla de Bad Bunny, Pedro Infante y Kenia Os

Local

Irapuato sufre mala calidad del aire; quemas posible causa

Partículas PM2.5 y PM10 han tenido niveles elevados

Local

Procurar la paz en los tres niveles, clave para consolidación de empresas: Coparmex

Estamos organizando con el Observatorio Ciudadano el foro exprésate 462 en el cual se está invitando a los candidatos que están contendiendo en Irapuato para que nos puedan dar sus propuestas

Local

Mejora percepción de seguridad en Irapuato: Inegi

Los delitos más comunes son robos, extorsiones, secuestros y fraudes

Local

¿Te gustaría correr con tu mascota? En Irapuato habrá carrera infantil pet friendly

Se recorrerá parte del Centro Histórico, junto a los amigos de cuatro patas