Los títeres, un mundo que permite a los niños a despertar su creatividad, ya que pueden interactuar durante su tan divertida presentación, como resultó durante la obra “La Pastelería” .
El espectáculo se realizó en el Teatro de la Ciudad, donde chicos y grandes no sólo disfrutaron de la obra, sino que conocieron un poco del teatro Guiñol.
Tras una divertida presentación con los actores más pequeños del mundo, los títeres, Pedro Sosa salió a escena para agradecer su presencia, pero también para que conocieran el trabajo que existe tras bambalinas.
El Sol de Irapuato tuvo acceso antes de comenzar la función, mientras los pequeños actores se alistaban con la ayuda de su creador Pedro Sosa, quien da vida a los títeres de guante.
Fueron los protagonistas Marianela -una gitana nacida en España y radicada en Guanajuato desde hace 25 años- e Italo esposo de Marianela -de origen italiano y pastelero de profesión- quienes ante las cámaras de El Sol de Irapuato manifestaron su entusiasmo por visitar esta ciudad y por el reconocimiento a su actuación.
Es Pedro Sosa quien dio vida a estos actores, les puso nombre, voz y hasta un oficio.
El maestro titiritero dijo que los títeres son su pasión y en cada uno de ellos esta su creatividad, su juego, su alegría, la cual comparte con miles de niños.
Durante su presentación con “La Pastelería” demostró su habilidad para la ejecución de movimientos de los muñecos elaborados en cerámica fría, además de los recursos utilizados para la musicalización del espectáculo, en el que parece existen cinco personas tras el escenario, cuando en realidad solo es una, solo es él, sólo es Pedro Sosa.
Una obra cuyos diálogos pueden ser improvisados y manejados con una temática actual, en donde se incluyen situaciones diversas ocurridas en el lugar donde se presenta.
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