La escritora regiomontana María de Alva presentó su novela “Un corazón extraviado” en el Tec. de Monterrey ante directivos, personal docente y alumnos.
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En el evento al que asistió la encargada de la librería Emma Godoy Alejandra Solís y el escritor colombiano Jaime Panqueva, la novelista platicó que éste es su cuarto libro, que tardó siete años en terminarlo y que el protagonista principal es el poeta y ensayista español Pedro Garfias, quien murió en 1967 en Monterrey.
La también licenciada en literatura hispánica y doctora en humanidades, dijo que se inspiró en una librería para escribir “Un corazón extraviado”, la cual fue fundada por el exilio español en Monterrey y duró unos cincuenta años abierta.
Comentó que ella iba mucho a esa librería porque era la mejor de la ciudad y cuando estaba estudiando la carrera de letras en el Tec. escuchaba que decían: “Aquí hubo un poeta, es el fantasma, está enterrado en el panteón del Carmen y a mí se me hacía maravilloso”.
María de Alva, aseguró que mucha gente no conoce a Pedro Garfias, pero que ahora que publicó su novela, se dio cuenta que entre círculos de escritores y gente que se dedica a la literatura si saben quien es.
Al abordar el tema de porque el título de “Un corazón extraviado”, explicó que le detectaron una arritmia cardíaca y se relaciona con su infancia porque ella nació con el corazón del lado derecho, por ello el titulo no es metáfora es literal, por eso “Hay dos historias la de Pedro Garfias y por otra parte la mía cuando empiezo a recordar todas las cosas de mi infancia por haber nacido con esa cardiopatía, que me ha traído algunos problemas”.
En el texto la autora cuenta anécdotas, cosas que le sucedieron y toda la parte médica de tener que ir a buscar, quien le podía tratar la arritmia, porque fue complicado y difícil para ella.
Mencionó que la novela habla de lo que es anormal y de los extravíos del cuerpo, ya que considera que es más importante hablar del fracaso y de lo anormal, “Porque el éxito no nos hermana como humanidad, lo que nos hermana es la vulnerabilidad que hay en la perdida”.
Al finalizar la presentación de “Un corazón extraviado”, la comunidad Tec. e invitados felicitaron a la escritora de 54 años con prestigio internacional y finalista en dos ocasiones del premio “Fernando Lara” en España.