Un triunfo compartido fue el que se tuvo en la gran corrida de rejones, en donde el maestro Andy Cartagena empató en trofeos con sus alternantes, Fauro Aloi y Tarik Othón, cortando dos orejas, aunque la actuación del español fue más ovacionada por los aficionados presentes, mostrando el matador su calidad como torero a caballo, cortando los apéndices a su primer rival, ya que en el segundo se fue en blanco luego de que no tuvo suerte a la hora de matar.
Una regular entrada de aficionados se tuvo en la corrida realizada a partir de las cinco de la tarde en el Coso Revolución, llegando los toreros a caballo listos para demostrar su valentía y habilidad, buscando cortar la mayor cantidad de apéndices a los toros de la ganadería de Arellano Hermanos.
Antes de comenzar con la corrida se presentó la escaramuza Flor de Fresa, quien ejecuto algunos ejercicios ante los presentes, posteriormente se ofreció un minuto de aplausos como homenaje póstumo al forcado Fito Valtierra, fallecido recientemente.
Ya entrando a la corrida, El primero en estar en el ruedo fue Tarik Othón, un joven que mostró un gran valor, con una cuadra bien trabajada, lució con su primer rival de nombre Candidato, colocando los rejones de castigo, para pasar luego a las banderillas, y matar de buena forma, obteniendo una oreja.
Su segundo rival, cuarto del lote, fue 50 Años, realizando una faena que se fue complicando, puso rejones y banderillas, pero a la hora de matar dio un pinchazo inicial con el rejón de muerte, aunque de inmediato vino la estocada letal, el juez no concedió trofeo alguno, aunque ante la petición de un sector de aficionados otorgo una oreja, aguantando el reclamo de otros aficionados que mostraron desacuerdo.
El maestro Andy Cartagena tuvo como rival a Roby, un ejemplar de 505 kilos, demostrando esa calidad que lo tiene encumbrando como uno de los máximos exponentes del rejoneo en el mundo, con unos corceles educados que se llevan el aplauso de los aficionados con su desempeño, logrando el español cortar un par de orejas.
Vino el segundo de su lote, Fresero, un astado con gran bravura, quien hizo batallar a los Forcados cuando entraron al ruedo, enviando a un par de ellos al suelo, al final no cedió ante el rejón de muerte y tuvo que bajar de su caballo Cartagena para matar luego de varios intentos, perdiendo los trofeos.
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Mientras que Fauro Aloi tuvo algunos problemas con Patito, aunque al final logro colocar el rejón de muerte de buena forma y también a petición de los aficionados, le fue concedida una oreja, el segundo adversario que tuvo fue Ferrocarrilero, cumpliendo con una buena faena para recibir el aplauso de los aficionados y salir con otra oreja, empatando en trofeos con sus alternantes.
