Tekchem, el cerro de La Cruz y el río Temascatío, son las zonas enfermas que demandan la reactivación del Plan Salamanca, cada uno de estos foco rojos arrastran un largo historial de contaminación y afectaciones a la salud.
Tekchem y el tiradero tóxico del cerro de La Cruz comparten una historia similar, son varias décadas de causar daños al medio ambiente y a la ciudadanía, en ambas zonas se iniciaron labores para retirar los pasivos ambientales, pero fue mínima la cantidad de residuos que fueron extraídos.
En torno a la contaminación que llega al río Temascatío por parte de las empresas que operan en la Ciudad Industrial, se desconoce si fueron atendidas las recomendaciones emitidas por las autoridades ambientales y cuántas multas han sido aplicadas, la realidad que enfrenan los pobladores de comunidades aledañas es que el problema de contaminación prevalece.
La contaminación del río Lerma, es otro conflicto de contaminación que adolece Salamanca, durante la pasada administración municipal el Consejo Consultivo Ambiental logró tener acercamiento con los directivos de Petróleos Mexicanos y se establecieron compromisos por parte de la dirigencia de la Refinería Ingeniero Antonio M. Amor (RIAMA) para disminuir las emisiones contaminantes al cuerpo de agua, sin embargo, hasta ahora no se ha podido conformar la nueva directiva del consejo.