Tóxicos del cerro de la Cruz nos están matando

Casi 50 años han transcurrido desde que el cerro de La Cruz empezó a ser utilizado por la empresa Químicos y Derivados (QUIDESA) para depositar residuos tóxicos, muchos han sido los habitantes de colonias y comunidades aledañas que han resentido afectaciones por la contaminación del lugar, con la ruptura de la hegemonía del Partido de Acción Nacional al frente del gobierno municipal de Salamanca, ambientalistas consideran que se abre la posibilidad de retomar acciones para buscar solución a este conflicto.

El Dato...

La extensión contaminada en el Cerro de La Cruz es superior a 6 hectáreas, en algunas partes la profundidad cubierta por lodos tóxicos alcanza los 45 metros, de las 45 mil toneladas de desechos, solo han sido retiradas 3 mil toneladas aproximadamente.

Fernando Baca Amador, integrante del Frente Regional Ciudadano en Defensa de la Soberanía, indicó que se buscará acercamiento con funcionarios de los tres niveles de gobierno para presentarles la denuncia ciudadana que hasta ahora ha sido ignorada.

Baca Amador, durante varias décadas ha promovido la remediación del Cerro de la Cruz, ha recopilado testimonios, videos y material gráfico de la contaminación que se concentra en esta zona de Salamanca, en la que se ha informado se depositaron 45 mil toneladas de desechos tóxicos, de los cuales únicamente han sido retiradas 3 mil toneladas.

“Ahorita toda la atención está en el tema de seguridad, pero esto está matando, pero no sabes a cuanta gente está matando, a lo mejor ha matado a muchas más de las que han muerto balaceados, pero no se da cuenta uno porque no hay una valoración del sector salud.

El integrante del Frente Regional Ciudadano, rememoró que la contaminación en el Cerro de La Cruz surge a mediados de la década de los años 60 con la llegada de empresas privadas, en ese tiempo no existían instancias como la SEMARNAT y la PROFEPA, por ende hubo total libertad para utilizar las oquedades del cerro para depositar desechos y enterrarlos.

Para concluir, Fernando Baca Amador, resaltó que además de que han sido afectados los habitantes de 25 colonias y comunidades aledañas, también se han filtrado a los mantos freáticos millones de metros cúbicos de líquidos y ácidos que se desprenden de los lodos tóxicos.