A pesar de las campañas de concientización y llamados a ser amigables con el medio ambiente, los irapuatenses siguen contaminando sus ríos con basura, plásticos, neumáticos y hasta escombros.
Por Irapuato pasan dos ríos, el río Guanajuato y el río Silao, desde hace décadas su agua dejó de ser cristalina y las personas dejaron de meterse a nadar y convivir a la orilla de estos, debido a que actualmente ambos ríos están bastante contaminados.
En el río Silao hay llantas, basura y mucho escombro, su agua es color verde y grisácea, pero a pesar de ello, la fauna como las aves, siguen acercándose a beber de su agua e incluso comer de la basura que dejan en el lugar; mucha de esa basura es arrojada por los mismos habitantes de la zona, quienes también prefieren alejarse de las orillas.
En el río Guanajuato la situación es bastante similar; sin embargo, actualmente hay más corriente que arrastra consigo las grandes cantidades de basura que son arrojadas por los habitantes de la zona; sin embargo, el agua no cambia su color, luce grisácea y a veces hasta verde.
Los ríos ahora son conocidos como una de las zonas más sucias, descuidadas e insalubres del municipio, donde son usados como basureros, pues las personas aprovechan para arrojar llantas, bolsas de basura, escombro, animales muertos, muebles e incluso electrodomésticos, sin que haya alguien que los sancione por causar contaminación.