GUANAJUATO, Gto. (OEM-Informex).- La lluvia con actividad eléctrica que se registró este sábado en Guanajuato capital, provocó que un rayo cayera sobre la cúpula del Templo de Pardo, el cual se ubica sobre la calle del mismo nombre y que data del Siglo XVIII.
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El rayo destruyó casi por completo la cúpula, e incluso provocó afectaciones en la techumbre de una de las habitaciones de la iglesia, además de un tejado de láminas.
Por fortuna, el incidente no causó afectaciones a personas, ya que al momento de los hechos en la habitación no se encontraba nadie y únicamente quedó en cuantiosos daños materiales.
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De acuerdo al alcalde Alejandro Navarro Saldaña, tras lo ocurrido personal de Protección Civil se desplazó al lugar a fin de realizar las primeras valoraciones, posteó el primer edil a través de su cuenta personal de Facebook.
De igual forma comentó que el templo debió ser cerrado, y será el día de mañana que personal de Obra Pública valore los daños para su rehabilitación.
Es de mencionar que el pasado 21 de junio de 2022 se entregaron las obras de restauración del Templo de San Diego de Alcalá y el Templo de Pardo.
El recurso del Templo de San Diego fue destinado para la intervención de sus cúpulas traseras, la cúpula de la sacristía, la Capilla de la Purísima Concepción y la Capilla del Señor de Burgos.
Se realizaron trabajos de retiros de aplanados con su debida integración, restauración de molduras, integración de injertos y piezas de cantera, así como impermeabilización con técnicas tradicionales y limpiezas en general.
En el Templo de Pardo se realizaron trabajos similares. Limpiezas generales en su cúpula y linternilla, integración de aplanados bruñidos y pintura, así como integración de aplanados y pintura a la cal en sus fachadas laterales y traseras.
La construcción del Templo de Pardo data de los primeros años del siglo XVIII. Entonces era una sencilla capilla dedicada a la Virgen de Guadalupe que formaba parte de la Hacienda de Minas de Nuestra Señora de Guadalupe o Pardo. En octubre de 1854 se colocó la primera piedra para la redificación de la Iglesia de Pardo.
Su fachada de cantera rosa es un bello ejemplo de barroco de tres cuerpos profusamente labrada con detalles florales. Cuenta con una torre de esbeltas proporciones y tres puertas de acceso.