El “Chato” Hernández ha sido parte fundamental de la concepción del mariachi en Irapuato

Para Ismael Hernández Beltrán mejor conocido “Chato” Hernández, su vida como mariachi ha sido de una vida muy bonita, llena de alegría, de ambiente, de satisfacciones y de grandes experiencias que ha disfrutado al máximo durante estos 55 años que tiene dedicándose al oficio de sus amores “El Mariachi”.

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En entrevista para El Sol de Irapuato, Ismael Hernández Beltrán comentó, que el verdadero “Chato” Hernández fue su padre, Ismael Hernández Jaramillo quien falleció hace varios años y que siempre recuerda con mucho cariño y gracias a él porqué me enseño esta profesión y ahora yo también he heredado a mis seis hijos, este gusto por la música y todos gracias a Dios, han sobresalido en esta profesión de la interpretación de la música mexicana.

Los recuerdos que envuelven la vida de Ismael Hernández Beltrán, platica con emoción el “Chato” Hernández, de recuerdos tengo muchos, buenos y malos, pero, eso sí le digo “con el mariachi tengo lo mejor porque como tal me ha dado mucho en la vida, grandes experiencias como haber compartido escenarios en acompañamientos con grandes artistas de la música ranchera.

En 1982 viajó a Europa en donde realizó una gira por seis meses llevando la música mexicana por aquellos países como por España, Francia, Suiza, Alemania, en particular en Múnich, donde le entregaron un reconocimiento cultural por la música ranchera que daba a conocer por aquellas regiones.

Otro de los grandes recuerdos fue cuando acompañaron a José Alfredo Jiménez, en el kiosco del jardín en Dolores Hidalgo, con el tema “Gracias” cuando él se empezaba a despedir 1972, a lo cual les agradeció, recuerda que les dijo “estos muchachos si saben acompañarme”.

El Chato Hernández, uno de los máximos exponentes de la música ranchera en Irapuato, ahora con orgullo, comentó que ha grabado 17 canciones, producciones que ha realizado en los estudios de sus hijos quienes radican en los Estados Unidos, los temas son “El Son Freseros”, “El Son Tequilero”, “El Sol Fresero”, “Gloria a Ti Señor”, “El chalán de la Loma”, “La Flecha Amarilla”, “12 de diciembre”, “22 de noviembre por Santa Cecilia”, “Mi quinceañera”, temas que ya en su mayoría se escuchan en redes sociales, gracias a que sus hijos las han dado a conocer y compartido e inclusive otros mariachis ya las interpretan.

Con alegría en su rostro y guitarra en mano el Chato Hernández, nos dice que el Son Fresero está dedicado a su querida ciudad de Irapuato para despedirse, canta una estrofa de esta canción con la que termina esta entrevista.

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“Yo le cantó aquí a mi tierra, un lugar muy conocido, un rinconcito qué lindo, por eso nunca te olvido está, es mi tierra fresera, lo digo a qui y donde quiera, por eso siempre regreso porque sé que cualquier día me espera”.