La Iglesia católica no descarta suspender la celebración de misas, ante la recomendación que lanzaron autoridades federales para no realizar eventos masivos a partir del próximo 23 de marzo, para evitar la propagación del coronavirus en el país.

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La Conferencia del Episcopado Mexicano emitió un comunicado en el que daba una serie de recomendaciones, como evitar que niños y adultos mayores no asistan a templos y capillas y poder seguir las celebraciones litúrgicas a través de redes sociales o televisión.

También está la posibilidad de celebrar misas al aire libre y solicitar a los fieles que la colecta se haga al final de la misma.

Sin embargo, el comunicado de la Conferencia del Episcopado Mexicano dice no es descartable "la posibilidad de suprimir más adelante los servicios litúrgicos, esto previendo la consulta previa a las autoridades civiles, y teniendo en cuenta el desarrollo de la pandemia en nuestro país".

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También fue insistido que durante la celebración de las misas no se den la mano las personas en el rito del saludo de paz, además de intensificar el lavado de manos y colocación de gel antibacterial de los sacerdotes que hayan tenido contacto con personas enfermas.