El Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, reconoció la labor de las personas que integran los colectivos de búsqueda para localizar a sus seres queridos desaparecidos y lamentó que sigan apareciendo fosas clandestinas en las que han encontrado cadáveres humanos.
Esto luego de que el pasado sábado integrantes de un colectivo de búsqueda dio a conocer que hallaron seis cuerpos en un predio ubicado en la carretera Irapuato-Romita.
Enrique Díaz Díaz que la localización de personas desaparecidas en fosas clandestinas representan un consuelo para los familiares de las víctimas, sin embargo, dijo que también es doloroso después de largas búsquedas encontrar los cuerpos de los desaparecidos.
"Siempre que tenemos esto, es un consuelo poder encontrar a alguien pero también es dolor y es una tristeza encontrar a veces personas desaparecidas porque nos indican que quedan muchas de nuestros seres queridos que han desaparecido y que no sabemos dónde están y que quedan ahí en el olvido".
Lanzó un exhorto a las colectivos de búsqueda a no perder la fe de localizar a sus seres queridos que están en calidad de desaparecidos, pues aunque son situaciones complicadas deben mantener con la esperanza de volver a verlos.
Externó su apoyo y gratitud a los colectivos de búsqueda y dijo que si bien las palabras no son suficientes para dar consuelo a alguien que está en busca de sus seres queridos es importante que sepan que hay personas que están con ellos.
"Yo ánimo a estas personas que con ahínco que a veces con pocas posibilidades y recursos buscan a sus seres queridos pero encuentran a otros y que estemos atentos todos como sociedad y cómo iglesia a estar cercanos".
