San Pedro Damiani, cardenal Benedictino es uno de los santos poco venerados en su día, ya no que reúne a un gran número de fieles católicos como otros santo, sin embargo, su intercesión ante Dios para la concesión de milagros le permitió ser canonizado en el año 1072 tras su fallecimiento.
Tras consultar el Martirologio Romano, el sacerdote José Román Alcántar Mosqueda del templo de Santa Anita explicó que San Pedro Damiani fue cardenal obispo de Ostia y doctor de la Iglesia, quien entró en el eremo de Fonte Avellana y promovió denodadamente la vida religiosa y en tiempos difíciles de la Reforma de la Iglesia trabajó para que los monjes de dedicaran a la santidad de la contemplación, los clérigos a la integridad de vida y para que el pueblo cristiano mantuviera la comunión con la Sede Apostólica.
Dijo que San Pedro Damiani es uno de los santos que no son tan conocidos por muchas personas, sin embargo, dijo que los milagros concedidos fueron importantes para su canonización y pese a que son pocas hay personas que se dan cita a los templos para venerarlo.
Manifestó que el Concilio Vaticano se dedica a realizar una selección de santos que han pasado al silencio porque son poco conocidos por los católicos y entre ellos está San Pedro Damiani quien fue canonizado pero que es venerado por un número reducido de personas.
Refirió que es común la visita al templo de Santa Anita de católicos y pide referencias de santos poco conocidos y dijo que son personas que les tienen devoción, ya que les ha concedido diversos milagros y principalmente para superar problemas de salud.
“Los requisitos para la beatificación y canonización son varios, los venerables no es necesario que hagan milagros porque solamente se les reconocen en sus virtudes, en el caso de San Pedro Damiani el si concedió milagros y por eso pudo ser canonizado”.