El problema de las adicciones afecta a todo el país y a otros cuantos alrededor del mundo, el combate a las adicciones se ha tomado desde varios puntos, sin embargo, actualmente se sabe que para disminuir y tratar de erradicar esta problemática, uno de los sectores que más vulnerables son es el de las y los jóvenes.
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Autoridades de los tres órdenes de gobierno, organizaciones civiles y sociedad organizada tuvieron una reunión para entregar los reconocimientos a los participantes de la capacitación “Cerebro adicto y consejería breve en adicciones, método ideas”.
Esta capacitación ayudará a cada persona a brindar un apoyo adecuado en este tema de las adicciones, algo que en la Mesa de Seguridad y Justicia consideraron un problema del cual se desprenden varios delitos más y situaciones que fracturan las instituciones tanto familiares como sociales.
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Hernán González Baqueiro, presidente de la Mesa de Seguridad y Justicia Irapuato, abordó el tema de las adicciones desde una gran área de oportunidad, la sinergia entre la sociedad y los gobiernos, pues aseguró que en estos casos no es suficiente tener fuerzas policiales grandes entre la población, sino que las distintas instituciones y sociedad civil organizada pongan de su parte para erradicar la drogadicción, algo que no será fácil pero no es imposible de lograr.
“Ya no puede solamente la autoridad en turno resolver, las autoridades están un tiempo y durante su mandato van a hacer lo que consideren correcto para resolver, pero acabando nos vamos a quedar nosotros como sociedad, por eso debemos interesarnos en participar en esta temática”, destacó.
Recordó que las mesas de Seguridad y Justicia en México nacieron de la necesidad en los años 90 cuando en zonas como Ciudad Juárez comenzaron a presentarse fuertes problemáticas de violencia, esto incentivó a la ciudadanía a participar en estos temas junto a las autoridades.
“La justicia es un tema complicado y si los ciudadanos no nos metemos a esto, ¿Quién lo va a hacer?”, dijo.
Durante el evento, Baqueiro señaló que los especialistas en temas de seguridad comparan la delincuencia con una línea de producción, donde por cada delincuente las autoridades tratan de poner a un policía, sin embargo, al final sin la intervención de la sociedad, las familias y las instituciones para parar esta línea, ninguna cantidad de uniformados será suficiente para parar la problemática.
Las distintas iniciativas de participación de los tres niveles de gobierno involucran mucho a los jóvenes en buenas prácticas púes es parte del camino a combatir la drogadicción.
“Si nos decidimos a hacerlo quizá en 20 años podríamos ver resultados, no es algo rápido, no es algo fácil y requiere mucho trabajo, ver éxitos y fracasos, trabajar de forma continua avanzar y retroceder pero se tiene que hacer.
“Hoy cada constancia representa más que un papel un compromiso de los que se han convertido en defensores de las adicciones, que han decidido marcar la diferencia en la vida de otros”.
LA FALTA DE JUSTICIA DEJA HUELLAS
Los cursos se llevaron a cabo en las instalaciones del Centro Comunitario de Salud Mental y Adicciones (Ce.co.sa.ma), en Irapuato.
Fabiola Santillán Jiménez, directora de Cecosama Irapuato, indicó que el combate a las adicciones va más allá de la idea de una persona consumidora, sino todo lo que cobija al hecho de que alguien se inicie en el consumo de sustancias, así como el daño que esto ocasiona a la familia.
“Damos por hecho conocer el tema de la justicia, pero pocos lo sentimos, los estragos en una sociedad con injusticias dejan grandes huellas, al no tener una justicia obtenemos enojos, frustraciones, y que se generen este tipo de mesas habla de ciudadanos preocupados y ocupados es una labor grande y frustrante, pero hay que insistir”.
Por su parte, a propósito del tema de la justicia y la frustración ciudadana, habló la doctora especialista en tanatología Katy Rico, quien resaltó que uno de los casos más fuertes que ha atendido relacionados con las drogas fue el de un niño de 12 años, quien fue testigo del asesinato de su padre a manos de sicarios, en el ataque perdió no sólo a su padre, sino a su hermano, al llegar a la atención la doctora se percata que a sus doce años, el adolescente habla de ser un gran sicario, con conocimiento de armamento y sobre todo con un gran rencor por lo sucedido.
“Esa manera de desvirtuar una vida que pudiese ser grande y de impacto a la sociedad, a raíz de esto puede caer en adicciones, en violencia, delincuencia etcétera”.
Por eso desde hace siete años trabaja de lleno con el tema del duelo y las adicciones y aseguró que el 100% de las personas atendidas han salido de una adicción y adoptaron un proyecto de vida, pues al trabajar el duelo no se perpetúa el regreso al dolor, al núcleo social que reafirma el tema de las adicciones.
El trabajo va de la mano con el centro Rescatando Ángeles A.C., Eduardo Padilla Alcocer, director del centro aseguró que el aumento del porcentaje de jóvenes entre los 12 y 16 años que han experimentado con drogas es alarmante y pone en peligro el futuro de la sociedad.
“Debemos asegurarnos de que quien se quiera sumar a esta lucha, debe ser tratado con respeto para trabajar en un futuro mejor para nuestros jóvenes en Guanajuato y que tengan la oportunidad de crecer en un entorno saludable y libre de drogas”.