El señor Artemio Feliciano, quien tiene una tienda de abarrotes en su casa de la calle Doctor Vértiz, en Las Heras, no pudo comenzar a comerciar, pues su negocio se vio afectado por las lluvias que provocaron encharcamientos e incluso el agua salía por las coladeras, lo cual impidió a sus clientes acudir a su negocio.
Artemio Feliciano se disponía a comenzar a dar apertura a su tienda a las 8 de la mañana, como es su horario habitual, y se percató de que el agua ya tenía una altura de unos 25 centímetros en la calle, lo que dificultaba que personas acudieran a comprarle por evitar mojarse.
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“Vivir así es muy feo, cada vez que llueve nos perjudica a todos los vecinos, y a nosotros como comercio, ya que se puede llegar a meter el agua hasta nuestro negocio y puede hasta dañarnos los refrigeradores que tenemos para vender”, contó.
El comerciante comentó que ya son varios años con este problema, por lo que incluso ya habían ingresado un escrito ante las autoridades municipales para que den una solución al tema de los encharcamientos y la salida de aguas negras hasta en el interior de algunas viviendas cada temporada de lluvia.
“Ya tenemos más de 7 años con este problema, estábamos mejor antes de que pavimentaran la calle, esto no sucedía y ahora las coladeras están hasta el tope, ademas de ser un foco de infección para los que vivimos aquí, ya estamos cansados cada que llueve es lo mismo”, añadió.
El comercio y la casa de Artemio es una de las varias que han sido afectadas desde los comienzos de la temporada de lluvias en la ciudad.
Vecinos adjudican los problemas de encharcamientos a la falla de las bocas de tormentas, alcantarillado y por la infraestructura de la calle, que comentan que está desnivelada.