/ domingo 2 de junio de 2019

Tertulia Literaria en Pénjamo

José Luis Calderón Vela es un profesor jubilado de las aulas, pero sigue activo en el mundo de las letras. Fue mi alumno en la Escuela Normal Oficial de Irapuato, durante ese período fue el poeta oficial de su grupo. Escribía versos por encargo de sus condiscípulos, con los cuales conquistaban corazones. ¡Ah, cuántos noviazgos y dos o tres matrimonios gracias a sus románticas poesías! Fue fundador de la Casa de la Cultura de Tarimoro y desde entonces quedó atrapado a esas instituciones. Con la misma facilidad con que usa la pluma, formó con escritores, poetas y aficionados una Red Estatal de Tertulias en Guanajuato.

La maestra Andrea Cuestas Rodríguez, coordinadora en Pénjamo invitó a los miembros de la Red Estatal y al público en general a la reunión del viernes 30 de mayo en un café del centro histórico, con tan buena mano que las letras atrajeron las lluvias y el convivio se tornó fresco, más ligero y muy ameno prolongándose más de una hora de lo programado. Entre los participantes estuvo la distinguida poeta Ma. del Pilar Gabriela Gómez Arce, varios estudiantes del Nivel Medio Superior y el Grupo Sabinos Literarios, es decir cuatro jovencitos, verdaderas promesas literarias. De ellos me permito dar a conocer algunos versos para deleite de mis lectores.
JORGE HERNÁNDEZ SÁNCHEZ: Eres el ave que reina. Eres el ave que reina/ en el cielo de mis pensamientos,/ semejantes a nubes/ en el día. / Semejantes a estrellas/ en la noche./ Eres el que habita/ con gloria y júbilo/ entre la tierra y el cielo/ en constante vuelo/ Eres el ave que peregrina/ que con su canto/ alegra el paisaje/ y aminora la soledad.

ROGELIO SALAZAR CARRRERA. A mi poeta. Poeta, ¡oh, dulce ente atemporal!/ Acompañante del solitario, complemento social,/ creador de mundos magistralmente ejecutados./ Trasmites:/ Melancolía, amor, alegría fantasía./ Evocas:/ Naturaleza, vida, muerte, justicia./ La bella simpleza y la más grande vistosidad,/ plasma tu razón de las cosas./ Solo aquellos que entienden tus metáforas,/ podrán descifrar la llave de la escritura./ Poeta, ¿cuántas experiencias acumulaste?/ ¡Tantas situaciones que enfrentaste!/ Dime, ¡Qué te permitió crear y desarrollar tu don?/ Poeta, toma mi mano y dame un poco de tu encanto.

JUAN FELIPE GARCÍA ROJAS. Efímero. Pasan mis horas frente a la barra de algún bar, distraído en el bullicio de la gente. El ruido. La música. El mareante humo de la ansiedad. Las botellas llenas de nostalgia y vacías de esperanza. A través de las tenues luces del Lugar, entre rostros sin nombre, labios sin dueño, pasos sin rumbo, te veo llegar… ¡y hay una luciérnaga entre tus dedos! Tus ojos, el lugar de mis mayores anhelos. ¡Cuántas veces pedí verlos esta noche! Tu sonrisa disimulada y mi corazón agitado. Tu rostro. Tantas veces lo he soñado. Cerca de mí. Cerca de nosotros, cerca del cielo y las estrellas con luciérnagas entre tus dedos.

SUSI ARTEAGA ESTRADA. Se deja de amar… Se deja de amar, ¿por qué?.Es abrir la mano y encontrarla vacía, es como el agua fresca que ya no quitó la sed, es caminar un camino y ve que es diferente a como fue la primera vez, es cortar la flor y ver poco a poco como muere sin querer, es mirar la luna indiferente, donde se posa la otra mirada en otro querer.

José Luis Calderón Vela es un profesor jubilado de las aulas, pero sigue activo en el mundo de las letras. Fue mi alumno en la Escuela Normal Oficial de Irapuato, durante ese período fue el poeta oficial de su grupo. Escribía versos por encargo de sus condiscípulos, con los cuales conquistaban corazones. ¡Ah, cuántos noviazgos y dos o tres matrimonios gracias a sus románticas poesías! Fue fundador de la Casa de la Cultura de Tarimoro y desde entonces quedó atrapado a esas instituciones. Con la misma facilidad con que usa la pluma, formó con escritores, poetas y aficionados una Red Estatal de Tertulias en Guanajuato.

La maestra Andrea Cuestas Rodríguez, coordinadora en Pénjamo invitó a los miembros de la Red Estatal y al público en general a la reunión del viernes 30 de mayo en un café del centro histórico, con tan buena mano que las letras atrajeron las lluvias y el convivio se tornó fresco, más ligero y muy ameno prolongándose más de una hora de lo programado. Entre los participantes estuvo la distinguida poeta Ma. del Pilar Gabriela Gómez Arce, varios estudiantes del Nivel Medio Superior y el Grupo Sabinos Literarios, es decir cuatro jovencitos, verdaderas promesas literarias. De ellos me permito dar a conocer algunos versos para deleite de mis lectores.
JORGE HERNÁNDEZ SÁNCHEZ: Eres el ave que reina. Eres el ave que reina/ en el cielo de mis pensamientos,/ semejantes a nubes/ en el día. / Semejantes a estrellas/ en la noche./ Eres el que habita/ con gloria y júbilo/ entre la tierra y el cielo/ en constante vuelo/ Eres el ave que peregrina/ que con su canto/ alegra el paisaje/ y aminora la soledad.

ROGELIO SALAZAR CARRRERA. A mi poeta. Poeta, ¡oh, dulce ente atemporal!/ Acompañante del solitario, complemento social,/ creador de mundos magistralmente ejecutados./ Trasmites:/ Melancolía, amor, alegría fantasía./ Evocas:/ Naturaleza, vida, muerte, justicia./ La bella simpleza y la más grande vistosidad,/ plasma tu razón de las cosas./ Solo aquellos que entienden tus metáforas,/ podrán descifrar la llave de la escritura./ Poeta, ¿cuántas experiencias acumulaste?/ ¡Tantas situaciones que enfrentaste!/ Dime, ¡Qué te permitió crear y desarrollar tu don?/ Poeta, toma mi mano y dame un poco de tu encanto.

JUAN FELIPE GARCÍA ROJAS. Efímero. Pasan mis horas frente a la barra de algún bar, distraído en el bullicio de la gente. El ruido. La música. El mareante humo de la ansiedad. Las botellas llenas de nostalgia y vacías de esperanza. A través de las tenues luces del Lugar, entre rostros sin nombre, labios sin dueño, pasos sin rumbo, te veo llegar… ¡y hay una luciérnaga entre tus dedos! Tus ojos, el lugar de mis mayores anhelos. ¡Cuántas veces pedí verlos esta noche! Tu sonrisa disimulada y mi corazón agitado. Tu rostro. Tantas veces lo he soñado. Cerca de mí. Cerca de nosotros, cerca del cielo y las estrellas con luciérnagas entre tus dedos.

SUSI ARTEAGA ESTRADA. Se deja de amar… Se deja de amar, ¿por qué?.Es abrir la mano y encontrarla vacía, es como el agua fresca que ya no quitó la sed, es caminar un camino y ve que es diferente a como fue la primera vez, es cortar la flor y ver poco a poco como muere sin querer, es mirar la luna indiferente, donde se posa la otra mirada en otro querer.